El Albacete pone al límite al UCAM Murcia (3-1)
La derrota de los universitarios en el estreno de Aira los deja en una situación crítica a falta de diez jornadas para el final de temporada
El UCAM Murcia no levanta cabeza. Se podía leer entre líneas una derrota de los universitarios hoy, pero en el fútbol, las sorpresas siempre pueden suceder. Que se lo digan a Italia. Pero no, no fue en este caso. Los universitarios sucumbieron ante el líder (3-1) y siguen estando en una situación límite. Y es que, cuando acabe la jornada completa, el UCAM Murcia se verá casi con total seguridad, a tres partidos de distancias respecto a la salvación con diez por disputarse. Una cifra matemáticamente salvable, pero que por sensaciones invita a pensar todo lo contrario. La primera parte del estreno de Aira fue para olvidar. Se fue ganando el Albacete por 2-0, pero la renta pudo ser superior. No salió el equipo a jugar y el líder hizo lo que quiso con los universitarios. La imagen cambió completamente en la segunda mitad, donde se vio un UCAM aguerrido que no quiso tirar la toalla. Superó en varios momentos del partido al Albacete y recortó distancias gracias a Rubén Mesa, pero un error garrafal de Tekio a cinco minutos del final, les dejó con la miel en los labios tras remar durante toda la segunda mitad.
El UCAM Murcia tenía ante sí un partido, a priori, muy complicado. Visitaba al Albacete, líder del Grupo II de la Primera RFEF. Visitaba un Carlos Belmonte que había sido inexorable durante toda la temporada. Tan solo un partido había perdido en su feudo el cuadro manchego. Encima, se presentaba el UCAM con un entrenador nuevo que apenas había encadenado unas cuantas sesiones de entrenamiento. La narrativa quería que José Manuel Aira se estrenara ante un equipo que guarda un gran recuerdo. Y es que, el técnico ponferradino consiguió el ascenso con el Albacete a Segunda División en la temporada 2016-2017.
En su primer once, no inventó nada nuevo Aira. Sacó un once de lo más reconocible, con jugadores que habían sido protagonistas con Ballesta. En la zaga, el único cambio fue Caro por un Josete lesionado. En la mediapunta volvió Moyita en posición de Xemi, sancionado. Y la única novedad relevante fue la vuelta de Liberto Beltrán al once, que había pasado al ostracismo con Ballesta.
Primera parte para olvidar
Y tan parecido fue su primer once respecto a su predecesor, que el resultado lo fue también. El UCAM Murcia fue completamente dominado en la primera mitad. Defendió con un 4-4-2, con Moyita y Rubén Mesa como doble punta, pero lo cierto es que su esquema ofensivo no se pudo saber porque no tocó la pelota. Si hubieran datos de posesión en esta categoría, en la primera mitad, sin exagerar lo más mínimo, habría sido de un 85 por ciento para el Albacete y un 15 por ciento para el UCAM. Fue una primera parte desastrosa en la que el Albacete evidenció todo. Evidenció la dinámica totalmente opuesta que llevan los dos equipos. Evidenció el porqué uno es líder y otro está en descenso. Y, en definitiva, evidenció quién es mejor y quién está mejor trabajado. Sobre el papel, a veces surgen sorpresas en este maravilloso deporte, pero no fue en esta ocasión. Lo tenía muy complicado el UCAMpor los factores mencionados con anterioridad, y así fue. Desde el primer minuto ya se sabía de qué color iba a ser el encuentro.
La primera parte finalizó con 2-0 en el marcador, pero lo cierto es que podrían haber sido muchos más. El equipo de Rubén de la Barrera asedió al cuadro murciano y no paró de llegar al área de Biel Ribas. Tras diez minutos de completa superioridad, con varias ocasiones ya generadas, vino el premio del gol para los manchegos. Kike Márquez, rodeado de jugadores universitarios, deshizo todo el entramado con un pase al hueco que dejó solo a Rubén Martínez, que con su pierna menos buena batió a Biel Ribas por el palo corto. Dio la impresión de que pudo tapar mejor el balear.
Fue un inicio de partido asfixiante, en el que no bajó el pistón en casi ningún momento. Solo tuvo un despiste durante los primeros 45 minutos y casi acaba en gol. Fue la única del UCAM, precedida de un error en la salida del Albacete. Rubén Mesa le puso un caramelo a Josema en el segundo palo, pero su remate al primer palo lo detuvo muy acertado Bernabé, arquero visitante. Ante un equipo tan poderoso, si no aprovechas la mínima ocasión que te conceden, lo terminas pagando más caro. Y así sucedió. Prácticamente, en la siguiente jugada, el Albacete hizo el 2-0. Otra vez con los mismos dos involucrados. Disparó Rubén Martínez, pero esta vez Biel Ribas la detuvo con una gran parada, pero el rechace le cayó a Boyomo, que la puso atrás para Kike Márquez para que hiciera el gol.
Se esperaba un partido inclinado hacia los dominios locales, pero no tanta superioridad. Fueron dos, pero pudieron ser más. No se vio a nadie en ataque y la defensa, a poco que le apretara un poco el Albacete entre líneas, temblaba. Ni Fullana ni Corbalán cerraron bien el medio, ni los laterales cortaron el pase a los extremos rivales. Hicieron mucho daño tanto Sergi como Rubén. Esos dos, unidos a la calidad de Kike Márquez, hacen un conjunto diferencial para la categoría.
Otra cara tras el descanso
El UCAM Murcia, tras la bochornosa primera parte, tenía que mejorar su imagen sí o sí tras el descanso, tanto por los desplazados como por orgullo propio. Y mejoró. Ya sea por relajación del local y o por urgencias visitantes, mejoró bastante. Desde el primer momento se vio a un UCAM más asentado en el campo, con una presión más adelantada y con algo de iniciativa. No mucha, pero bastante más que en la primera. El resultado de eso fue la primera ocasión mediante jugada trenzada. Otra vez Josema, con la pierna zurda, tuvo el gol tras un recorte para dentro.
El paso de los minutos refrendó la nueva imagen del UCAM Murcia y empezó a llegar con más asiduidad, además de tener mucho más dominio con la pelota. Cambió radicalmente la imagen de la primera mitad a la de la segunda. Siguió llegando con un Josema muy activo, que fue la clave en la parcela ofensiva. Gracias a él, el UCAM recortó diferencias. Filtró un muy buen pase a Rubén Mesa, que con un control orientado perfecto, disparó para poner el 2-1. Se metió el UCAM en el partido. Con orgullo y presión, comenzó a voltear el ritmo del partido.
Restaban 20 minutos para la heroica y los universitarios no pararon de adquirir protagonismo con transiciones muy rápidas. Empequeñecieron a un Albacete que mostró su peor cara.
Pero a pesar de estar jugando mal, un chispazo le sirvió para finiquitar el partido. Tekio se durmió en exceso y apareció para robarle la cartera Jordi Sánchez, ex del UCAM. El delantero se fue hacia la portería como un demonio y asistió para que Rubén hiciera el segundo en su cuenta particular a falta de cinco minutos para el final. Otro jarro de agua fría para el UCAM y ya van tropecientos esta temporada.
Se le complica la vida al UCAM Murcia, que seguramente, cuando acabe la jornada completa, se quedará a tres partidos de la salvación. Quedando solo diez, tendrá que tirar de la heroica. Y más viendo el calendario que le espera. No pinta bien la cosa, pero hasta el rabo todo es toro.
Fuente: Laopiniondemurcia.es