No logra la victoria, pero vuelve a resistirse a entregar la categoría por muy mal que se le pueda poner el partido. En su visita al At. Pulpileño, el Águilas FC sumó un punto (2-2) que le sirve de poco, pero vuelve a demostrar que tiene fe y calidad para superar la situación que tiene en la tabla. Jugó con diez jugadores durante más de una hora por la expulsión de Mike Gaffoor, encajó el primer gol justo antes del descanso y llegó a verse con una desventaja de dos goles. Pero a base de juego y no rendirse, logró el empate, incluso tuvo oportunidades para ganar el partido.
El equipo costero controló gran parte del primer periodo, aunque sin apenas ocasiones. Los jugadores de Stankovic tocaban en la medular con criterio pero sin llegar a aproximarse con peligro al área local. Los de Pulpi esperaban el error de los costeros, con una presión agobiante en la salida del esférico. A la media hora, en un control en la medular que se le fue largo a Mike Gaffoor, entró con la plantilla de su bota a Borja García, y el colegiado sentenció con la expulsión del central aguileño, con roja directa, dejando a los costeros con diez jugadores para afrontar la hora que restaba de partido.
Sin embargo, los costeros no modificaron su dibujo táctico, comenzaron a jugar con más verticalidad, buscando a Víctor Fenoll y Cristo Martín por la izquierda. A falta de tres minutos para el descanso, Quim Araujo lanzaba desde la frontal, pero el balón cruzaba el área sin encontrar ni rematador, ni portería. Cuando mejor jugaba el equipo costero, los locales realizaban una jugada al primer toque, basculando el esférico de la banda izquierda a la banda derecha, David Ardil centraba al área para que David Segura, libre de marca, rematara a gol. Los locales se iban al descanso con ventaja en el marcador.
La segunda parte arrancó con mucho respeto entre los dos equipos. La ventaja de los locales les permitía no arriesgar y esperar su momento, que llegó al cuarto de hora tras una jugada de David Segura, quien desde la línea de fondo servía a Iñigo Barrenetxea para que marcara a placer. El 2-0 parecía una ventaja insalvable para los costeros, con un jugador menos, pero a los dos minutos, un centro a la frontal del área local lo peinaba de cabeza Rafa Chumbi, dejando solo a Cellou, quien no perdonó marcando el primer gol de los costeros. Seguían avisando del gol del empate los costeros, el cual llegaría tras una falta que sacaba Cristo Martín para que rematara en el segundo poste Uri.
Hasta el final del partido, la victoria pudo ser para cualquiera de los dos equipos. Los visitantes la tuvieron en una jugada Javi Areso, que finalizó con un lanzamiento demasiado cruzado, mientras que los costeros tuvieron más tiempo el balón cerca de la portería rival, pero solo Cellou dispuso de la ocasión más clara. Un empate que en la clasificación deja poco premio, que sí lo obtienen los costeros al volver a demostrar que este campeonato no está terminado y aún les queda mucho guerra que dar.
Fuente:Laopiniondemurcia.es