Un tanto de Iván en el minuto 87 que es muy protestado por los visitantes le deja sin el empate.
Al Yeclano Deportivo se le volvió a escapar un nuevo partido en el tramo final del choque (1-0), cuando un más que dudoso penalti decantó el duelo para el Sevilla Atlético. Un tanto que birló del impacto moral a los azulgranas de dejar la portería a cero por primera vez desde el primer partido de liga, y que dio un alegrón tremendamente fugaz a los sevillistas, ya que vieron como su eterno rival, el Betis B, remontaba en Córdoba y les dejaba fuera de la lucha por el ascenso a Segunda.
El choque tuvo guión de partido largo para los de Sandroni, ordenados y solidarios en un terreno de juego muy largo y de espectacular césped. El Yeclano se fue encontrando cada vez más cómodo pero lo más destacado arriba fue un tiro exterior del reconvertido a lateral Alberto Oca, que se fue fuera.
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El aviso sevillista llegó en el tramo final de la primera parte, con dos remates fuera de Luismi e Iván en sendas jugadas clarísimas dentro del área. Tras el descanso, el choque se reanudó con otra opción clarísima para los locales, en una contra rápida donde Gianni salió de su área sin poder cortar ante Iván, pero Manu Castillo salvó in extremis.
Sandroni quería pulmones y piernas, y optó por refrescar con Gastón por un Vaquero activo que había visto la amarilla. Eso sí, la zona de banquillos no se limitaba a los entrenadores, y el delegado de campo fue casi el jugador número doce en su marcaje a un Donato Pedreira que iba sacando de quicio poco a poco a los azulgranas.
Con toda la carne en el asador por parte del Sevilla, el Yeclano vio como el colegiado volvía a cometer otra decisión determinante en forma de cruz para los azulgranas. Iker Jiménez ya habría hecho varios programas conspiranoicos al ver como, por cuarto partido consecutivo, un árbitro del colegio balear marcara en el camino hacia la derrota para los de Sandroni. El pichichi Iván demostró cómo se ha de ejecutar un penalti lanzando con fuerza al lado que adivinó Gianni, y provocó la explosión de júbilo de suplentes y juveniles del Sevilla.
Fuente: La Opinión de Murcia.
